¡Venga tu Reino!: Nuestra oración por Argentina, América Latina y todo el mundo.

¡Venga tu Reino!: Nuestra oración por Argentina, América Latina y todo el mundo. Cuando leemos los evangelios nos encontramos que Jesús seguía la tradición de los profetas centrado en la Justicia, Misericordia y Humildad (Mi 6:8, Mc 6:14-16, 9:11-13). El profeta Miqueas nos recuerda: ¡Ya se te ha declarado lo que es bueno!. Ya se te ha dicho lo que de ti espera el Señor: Practicar la justicia, amar la misericordia, y humillarte ante tu Dios, Mi 6:8. Miqueas responde con un duro mensaje sobre lo que es el verdadero servicio a Dios y a toda sociedad. Es una vida caracterizada por tres profundos elementos: Justicia, Misericordia y Humildad. Estamos llamados a hacer justicia (poner orden en la vida y las cosas), a amar la misericordia (vivir con profunda compasión), y a caminar humilde delante de Dios. La vida repensada bajo esta mirada, es lo que Dios quiere y lo que el mundo necesita desesperadamente. En nuestros países y el mundo se habla de democracia, la importancia de la distribución de la riqueza, el derecho y servicio a los pobres, la libertad, el bienestar, la justicia. Es un buen discurso pero surge una pregunta: ¿Cómo es nuestra realidad? ¿Se defiende el derecho de unos y se viola el derecho de otros? ¿Qué pasa con los que tienen limitación o poco acceso a la salud, vivienda, educación y trabajo? ¿Qué sucede con los que no tienen voz y se violan los derechos humanos? (Pr 31:8-9). ¿Se defiende y afirma el derecho a la vida, "a toda vida"? Oramos a Dios por todos los ciudadanos y nuestros futuros gobernantes. "Concédenos sabiduría para entender como debe ser una sociedad ordenada, justa y compasiva. Danos sabiduría para saber qué hacer con la realidad del mal. Concédenos sabiduría para sostener a los indefensos y "a toda vida". Danos sabiduría para amarte y amar a nuestro prójimo como a nosotros mismos. Señor, te pedimos que nuestros líderes te busquen pidiendo sabiduría. Dales sabiduría. Ayúdales a ser servidores del bien común. Ayúdalos a valorar la veracidad y no la mentira. Inspíralos a conducirse con respeto y dignidad. Reduce la insensatez, la necedad y la imprudencia. Oramos específicamente por asuntos de gran peso que deben tratarse: justicia social, seguridad pública y administración fiscal. Que podamos ser una nación que dependa de ti, reconozca tus bendiciones y valore lo que tú valoras. Edifícanos en integridad de actitud, conducta y carácter. Que no demos la espalda a la miseria y al sufrimiento humano. Danos valentía para conocer el dolor de los demás. Oramos por los pobres. Oramos por los oprimidos. Oramos por aquellos que sufren la indignidad de la discriminación en cualquier forma. ¡Venga tu Reino!"