viernes, 28 de noviembre de 2025

La actividad del Espíritu Santo es siempre sorprendente. “Y aunque la gente de este mundo piensa que ustedes son tontos y no tienen importancia, Dios los eligió, para que los que se creen sabios entiendan que no saben nada. Dios eligió a los que, desde el punto de vista humano, son débiles, despreciables y de poca importancia, para que los que se creen muy importantes se den cuenta de que en realidad no lo son. Así, Dios ha demostrado que, en realidad, esa gente no vale nada. Por eso, ante Dios, nadie tiene de qué sentirse orgulloso”, 1 Co 1:27-29.

Manifestación milagrosa

"Entonces Pedro dio un paso adelante junto con los otros once apóstoles y gritó a la multitud: «¡Escuchen con atención, todos ustedes, compatriotas judíos y residentes de Jerusalén! No se equivoquen. Estas personas no están borrachas, como algunos de ustedes suponen. Las nueve de la mañana es demasiado temprano para emborracharse", Hch 2:14-15

Pedro le habla a una multitud: "Lo que pasa es que hoy Dios ha cumplido lo que nos prometió, cuando por medio del profeta Joel dijo: “En los últimos tiempos les daré a todos de mi Espíritu: hombres y mujeres hablarán de parte mía; a los jóvenes les hablaré en visiones y a los ancianos, en sueños", Hch 2:16-17. Es uno de los milagros más sorprendentes de todo el texto bíblico. Pedro explica que estas personas no están borrachas. En muchos lugares de nuestro continente y del mundo hay un énfasis en la presencia y el poder del Espíritu Santo. Como sucedió en Pentecostés hay quienes miran de afuera y piensan que estamos descentrados o fuera de sí. Es ahí donde las acusaciones se describen como irracionales, emotivas o ignorantes. Son personas que no logran sorprenderse por el milagro de la gracia de Dios. Y porque no pueden sorprenderse, se burlan de los demás. Quien cree saber cómo el Espíritu Santo va a actuar, se arriesga a no ver su acción cuando tenga lugar. La actividad del Espíritu Santo es siempre sorprendente. “Y aunque la gente de este mundo piensa que ustedes son tontos y no tienen importancia, Dios los eligió, para que los que se creen sabios entiendan que no saben nada. Dios eligió a los que, desde el punto de vista humano, son débiles, despreciables y de poca importancia, para que los que se creen muy importantes se den cuenta de que en realidad no lo son. Así, Dios ha demostrado que, en realidad, esa gente no vale nada. Por eso, ante Dios, nadie tiene de qué sentirse orgulloso”, 1 Co 1:27-29. “Y esa esperanza no acabará en desilusión. Pues sabemos con cuánta ternura nos ama Dios, porque nos ha dado el Espíritu Santo para llenar nuestro corazón con su amor”, Ro 5:5

Carlos Scott

Foto Gilbert Lennox

jueves, 27 de noviembre de 2025

“No agravien al Espíritu Santo de Dios, con el cual fueron sellados para el día de la redención”, Ef. 4:30. No menospreciemos a otros hermanos o sectores de la iglesia. Vivamos el poder del amor y no el amor al poder.

Percibir algo más

“Otros se burlaban y decían: «Lo que pasa es que están borrachos”, Hch 2:13
 
Cuando el Espíritu Santo descendió en el día de Pentecostés no todos vieron este milagro, no todos respondieron positivamente. ¿Cómo puede ser que algunos no percibieron lo que estaba ocurriendo en Pentecostés? ¿Por qué algunos encontraron un motivo de burla? Cuando pensamos que el Espíritu se debe manifestar de una sola manera corremos el peligro de no percibir algo más. Es como decir: “Nosotros sabemos todo, tenemos todas las respuestas”. Cuando esto sucede, perdemos la capacidad de asombro. En ese momento aparece la burla que refleja una vida basada en prejuicios y conceptos cerrados. Hay personas que se quedan atrapadas en la letra y no en el espíritu. Se busca la seguridad en el reglamento, los estatutos y la tradición. Los que aparentemente saben todo o creen que están en ventaja, corren el peligro de quedarse atrás porque no pueden ver lo extraordinario que está ocurriendo. Solo los que piensan que Dios se manifiesta de una sola manera hacen de la vida cristiana un método y un sistema. El Espíritu sopla de donde quiere, Jn 3:8. Cuando se teme o se critica, lo que se puede estar temiendo, es la pérdida del control. Se nos llama a no entristecer al Espíritu Santo: “No agravien al Espíritu Santo de Dios, con el cual fueron sellados para el día de la redención”, Ef. 4:30. No menospreciemos a otros hermanos o sectores de la iglesia. Vivamos el poder del amor y no el amor al poder. “El libro de los Hechos nos habla que el Espíritu Santo actúa, no para hacer que todos se conformen al mismo patrón, o que todos sean iguales, sino para que la gracia de Dios sea accesible a todos por igual.”
 
Carlos Scott

Foto Gilbert Lennox

miércoles, 26 de noviembre de 2025

PROCLAMACIÓN: Recuperando la alegría de compartir a Jesús | Andrés Pérez

Somos desafiados a no perder la capacidad de asombro. La actividad del Espíritu Santo es siempre una experiencia que nos supera, nos sorprende y caemos rendidos a Él.

Seguir al Espíritu y percibir el milagro 

"Y no salían de su asombro, ni dejaban de preguntarse: «¿Y esto qué significa?», Hch 2:12
 
El libro de los Hechos nos da a entender el modo en que el Espíritu obra en la comunidad de fe. Si bien la iglesia pasó de 120 a 3000 personas en un solo día, no todos pudieron percibir el milagro. Algunos estaban desconcertados y perplejos, se preguntaban: "¿Qué quiere decir esto?" Otros se burlaban y decían “lo que pasa es que están borrachos”. No entregarme a la vida del Espíritu es no poder percibir el milagro que Dios quiere hacer en este mundo. Una iglesia guiada por el Espíritu Santo es una iglesia que no se burla, ni descalifica a los demás, Hch 2:13, Mc 6:1-6. Es abierta al Espíritu (Mc 3:20-30, Lc 11:14-23), busca su llenura (Hch 4:23-31) y se dedica a la oración (Hch 1:14). Hablamos de una iglesia abierta al mundo que entiende que el evangelio es para toda clase de persona sin excepción, Hch 10:34. Somos desafiados a no perder la capacidad de asombro. Lamentablemente muchos piensan que el Espíritu Santo se ha de manifestar solo de una manera particular en la predicación, servicio o culto y si no es así, nos burlamos de otros, los tratamos mal o los descalificamos. La actividad del Espíritu Santo es siempre una experiencia que nos supera, nos sorprende y caemos rendidos a Él.

Carlos Scott

Foto Gilbert Lennox

martes, 25 de noviembre de 2025

En Pentecostés Dios le dio su aprobación al pluralismo lingüístico y cultural. Babel fue un monumento al orgullo de un grupo humano, Gn 11:1-9

Unidad sin uniformidad

“¡Todos por igual los oímos proclamar en nuestra propia lengua las maravillas de Dios!”, Hch 2:11

En Pentecostés Dios le dio su aprobación al pluralismo lingüístico y cultural. Babel fue un monumento al orgullo de un grupo humano, Gn 11:1-9. Utilizaron su unidad lingüística y recursos para dar rienda suelta a su orgullo. Dios los confundió y lo que produjo fue la multiplicidad de lenguas. Lo que Dios produce en Pentecostés es también una multiplicidad de lenguas donde ningún idioma predomino sobre los demás. En un pequeño grupo de cultura y lengua uniforme surge una explosión multilingüe y multicultural por el poder del Espíritu Santo. No debemos entender la unidad como uniformidad. La comunidad de la iglesia debe ser como una danza de vida y amor. ¿Cómo podemos bailar juntos, alrededor, en la danza de la vida y el amor? ¿Cómo aprendemos los pasos de esta danza? Debemos dejar la división, pero no la diferencia; dejar la uniformidad, pero no la diversidad; dejar el individualismo, pero no la distinción y personalidad. Implica que hay diversidad sin uniformidad, diferencia sin división y distinción sin individualismo. Es cuando estamos compenetrados con el otro respetando su personalidad. Hacer espacio para otros, vaciarnos de nosotros mismos y ser humildes. Respetar, dar dignidad y tener una relación cara a cara. El sentido de cooperación, solidaridad y unidad que se basa en el Dios trinitario implica darnos lugar unos a otros. “Cada vez que sentimos que la vida es demasiado complicada o fracturada -muchas piezas para resolver, demasiada diversidad, demasiadas diferencias, nuestro Dios nos recuerda que construyó la unidad y la diversidad en el propio diseño de la vida. Podemos confiar en la unidad, y debemos saborear la diversidad. Esa es nuestra única esperanza de llevarnos bien en nuestras comunidades. Él es un Dios de paz y no un Dios en pedazos." Nuestro desafío como iglesia es que seamos uno y alcancemos la perfección en la unidad para que el mundo crea, Jn 17:20-21

Carlos Scott

Foto Gilbert Lennox

lunes, 24 de noviembre de 2025

Ser creados a la imagen de Dios implica que el ser humano no esté solo y viva en comunidad. El Espíritu Santo nos desafía a evidenciar esta imagen. Unidad con distinción, distinción sin mezcla, y unidad sin separación

Espíritu de unidad

“Los que estamos aquí somos de diferentes países. Algunos somos de Partia, Media y Elam. Otros vinimos de Mesopotamia, Judea, Capadocia, Ponto, Asia, Frigia, Panfilia y Egipto, y de las regiones de Libia cercanas al pueblo de Cirene. Muchos han venido de Roma, otros han viajado desde la isla de Creta y desde la península de Arabia. Algunos somos judíos de nacimiento, y otros nos hemos convertido a la religión judía. ¡Es increíble que los oigamos hablar, en nuestro propio idioma, de las maravillas de Dios!», Hch 2:9-11

Hay una visión que deriva del Pentecostés y es que el Espíritu de Dios se derrama sobre todo el género humano, Hch 2:17. Dios une personas de diferentes trasfondos y somos llamados a expresar una fe trinitaria, una fe relacional, en comunidad. Ser creados a la imagen de Dios implica que el ser humano no esté solo y viva en comunidad. El Espíritu Santo nos desafía a evidenciar esta imagen. Unidad con distinción, distinción sin mezcla, y unidad sin separación. Implica amarnos unos a otros, recibirnos y aceptarnos mutuamente. La vida del ser humano no puede ser buena a menos que se desarrolle en comunidad. Somos llamados a ser una comunidad trinitaria. En la antigüedad usaban la palabra perijóresis o perichóresis para describir esta realidad. Se trata de un término griego que está construido por dos palabras: una es peri (alrededor) y el otro choreo (danzar). Es bailar juntos danzando en círculo o alrededor. Significa “intercambiar lugares”, “danzar en torno”. Una danza de vida y amor. Esta fe y amor trinitario es mutuamente sacrificial donde cada persona renuncia a sí misma para encontrarse con las otras. Nos desafía a cerrar las grietas en la iglesia y en la sociedad. Es una fe relacional, se experimenta en comunidad y sugiere que seamos semejantes a la unión entre las Personas divinas de la trinidad. Sugiere la unidad en la verdad y el amor. Se nos llama a ser una comunidad trinitaria que es abierta e invita.

Carlos Scott

Foto Gilbert Lennox

domingo, 23 de noviembre de 2025

PARTICIPACIÓN: Creando una cultura del reino | Efraín Jiménez

Pentecostés implica ser una iglesia abierta que glorifica a Dios. Es una iglesia que mira hacia fuera, es inquieta, camina por todas partes, busca la simplicidad y se atreve hacer cosas diferentes. "La fe cristiana es una fe que nació para caminar"

Una fe que camina

"En aquel tiempo, muchos judíos que amaban a Dios estaban de visita en Jerusalén. Habían llegado de todas las regiones del Imperio Romano. Al oír el ruido, muchos de ellos se acercaron al salón, y se sorprendieron de que podían entender lo que decían los seguidores de Jesús. Estaban tan admirados que se decían unos a otros: «Pero estos que están hablando, ¿acaso no son de la región de Galilea? ¿Cómo es que los oímos hablar en nuestro propio idioma?», Hch 2:5-8
 
La comunidad de los creyentes se organizó en Jerusalén donde dio sus primeros pasos, pero con motivo de la persecución camina hacia Samaria, Antioquia y luego a todo el mundo. Ellos comenzaron a viajar en vez de protegerse y predicaban a Jesucristo. El mundo necesita ver una iglesia abierta que sea inclusiva y no exclusiva. La iglesia que surge en el Pentecostés es una iglesia pública, la gente escucha y ve. Es una iglesia misionera porque nace hablando a todas las lenguas y no pasa desapercibida. Pentecostés implica ser una iglesia abierta que glorifica a Dios. Es una iglesia que mira hacia fuera, es inquieta, camina por todas partes, busca la simplicidad y se atreve hacer cosas diferentes. "La fe cristiana es una fe que nació para caminar". Hablamos de una iglesia donde pueda predominar una dimensión eclesial y no clerical. Una iglesia donde se ejerce el sacerdocio universal de todos los creyentes. La gente es libre, respetada y vive el poder del amor. El Espíritu Santo llama a su iglesia a repensar su estructura o institucionalidad para enfocarnos en su misión. Este tiempo puede ser un buen momento para pensar en cómo salir de los modelos de repetición e imitación para centrarnos en lo nuevo que viene del Espíritu de Dios.

Carlos Scott

Foto Gilbert Lennox

sábado, 22 de noviembre de 2025

"Todos fuimos colocados por un solo Espíritu para constituir un solo cuerpo, y a todos se nos dio a beber de un mismo Espíritu", 1 Co 12:13

Sobrenatural

"Fue así como el Espíritu Santo los llenó de poder a todos ellos, y enseguida empezaron a hablar en otros idiomas. Cada uno hablaba según lo que el Espíritu Santo le indicaba", Hch 2:4
 
"Todos fuimos colocados por un solo Espíritu para constituir un solo cuerpo, y a todos se nos dio a beber de un mismo Espíritu", 1 Co 12:13. El Señor nos colocó en su cuerpo. Un solo cuerpo. La iglesia es el cuerpo de Cristo y Él es su cabeza. No estamos en una comunidad o iglesia local porque tengamos un proyecto común, sino porque juntos hemos sido llamados por Dios. Dios se complace en hacer vivir juntas a personas muy distintas. Humanamente parece un desafío imposible, pero esto da certeza que ha sido Dios quien nos ha elegido para vivir en la iglesia universal y su expresión concreta en la comunidad local. Por la acción del Espíritu Santo lo imposible se convierte en posible: "En esto conocerán todos que son mis discípulos; si se aman los unos a los otros", Jn 13:35
 
Carlos Scott

Foto Gilbert Lennox

viernes, 21 de noviembre de 2025

La venida del Espíritu produce algo. Provoca apertura o rechazo. Es imposible mantener en privado lo que ocurre públicamente

Lo que oyeron y vieron

"De pronto, oyeron un ruido muy fuerte que venía del cielo. Parecía el estruendo de una tormenta, y retumbó por todo el salón. Luego vieron que algo parecido a llamas de fuego se colocaba sobre cada uno de ellos”, Hch 2:2-3

La venida del Espíritu Santo fue imposible de contener, tampoco silenciar y controlar. La iglesia que nació en el día del pentecostés no paso desapercibida. Nació a la vista de todos y enfocada en todas las lenguas. La venida del Espíritu produce algo. Provoca apertura o rechazo. Todos presenciaron el nacimiento de la iglesia y fue algo público. Es imposible mantener en privado lo que ocurre públicamente. Es una iglesia que no se queda neutral. Esto es la comunidad del Reino de Dios. No fue un espectáculo sino un acontecimiento extraordinario. Nació siendo misionera y luego se desarrolló saliendo a todos lados. La iglesia no es un proyecto privado y está abierta al mundo para glorificar a Dios. Se organizo en Jerusalén, da sus primeros pasos, pero luego hay movimientos de gente a todas partes. Luego nos encontramos con la iglesia de Antioquía donde prevalece una actitud intencional para organizarse en relación con la misión. El mundo necesita ver una iglesia abierta que no retiene a sus miembros, que está en marcha, en misión y no en el mantenimiento, que va a todos lados y da testimonio de nuestro Señor Jesucristo. Es una iglesia que se está haciendo al caminar y mientras camina hace discípulos declarando el Señorío de Jesucristo sobre toda la creación. Somos llamados a formar parte de esta comunidad, traer alegría y esperanza a un mundo necesitado. “Edificaré mi iglesia, y el poder de la muerte no la conquistará”

Carlos Scott 

Foto Gilbert Lennox

Daniel, Martu e Iker Scott 🤍

¡Hola, amigos!

En este video corto queremos abrir nuestro corazón y compartir contigo un sueño, así como la razón por la que creemos que Dios ama profundamente al *pueblo vasco, su **lengua* 🗣️ y su *cultura* 🌿.

Con cariño,

Daniel, Martu e Iker 🤍


jueves, 20 de noviembre de 2025

Sígueme: La palabra que lo cambia todo | Andrés Pérez

Día en el que se rompió el orden y la ley se mostró insuficiente. ¿Qué quiere decir esto?

Día de Alegría

“Cuando llegó el día de Pentecostés, estaban todos juntos en el mismo lugar… Todos fueron llenos del Espíritu Santo y comenzaron a hablar en diferentes lenguas, según el Espíritu les concedía expresarse”, Hch 2:1-4
 
La palabra pentecostés significa o hace referencia al número cincuenta. Era el nombre que los judíos de habla griega le daban a la fiesta de las semanas o Pentecostés, porque se efectuaba siete semanas o cincuenta días después de pascua, que era cuando comenzaba la cosecha de granos (Ex 34:22, Dt 16:9-12, Nm 28:26-30, 2 Cr 8:12-14). Originalmente era una celebración agrícola que se realizaba cuando se completaba la cosecha.  La celebración del Pentecostés entre los judíos se fue transformando poco a poco en una celebración de la entrega de la ley a Moisés en el monte Sinaí, porque se consideraba que había ocurrido cincuenta días después del éxodo. La consecuencia de ser bautizados por el Espíritu Santo es que comenzaron a hablar en lenguas o idiomas de algún tipo según el Espíritu les concedía expresarse. Estos idiomas eran lenguas que se hablaban en el mundo conocido de ese entonces y que ellos no habían aprendido. No había necesidad de traductores y otros les podían entender. ¿Qué quiere decir esto? La nueva era del Espíritu había comenzado. “El fenómeno mismo de hablar en lenguas tiene el propósito de comunicar el mensaje”. La iglesia nace hablando a todas las lenguas. Es una iglesia misionera creada por Dios. Harold Segura comenta: “Día en el que celebramos la superioridad del Espíritu sobre la Ley * Día de la esperanza que nos hace libres (Juan 8:31) *Pentecostés, día de estruendos (Hechos 2:2) que hacen temblar y que sacuden la aparente estabilidad de las instituciones humanas. * Día de lenguas extrañas (2:4) que acercan a los que estaban distantes. * Día en el que la alegría de los santos parece borrachera (2:13) y los profetas ya olvidados (2:16) sirven para interpretar lo que los sobrios no logran entender. * Día en el que se rompió el orden y la ley se mostró insuficiente.
 
Carlos Scott

Foto Gilbert Lennox

¿Cuál es el sentido de la vida? | Efraín Jiménez

miércoles, 19 de noviembre de 2025

Discípulos que hacen historia y cambian la historia. Saben decir ¡SI!

Un modelo a seguir

La iglesia de Antioquía jugó un papel importantísimo en la vida de la iglesia universal. Un grupo de personas anónimas, huyendo de la persecución, sin mayores recursos y planes, compartieron el evangelio con todos. Se atrevieron hacer cosas diferentes, «Y la mano del Señor estaba con ellos, y gran número creyó y se convirtió al Señor» Hch 11:21.


Cada seguidor de Jesucristo es llamado a participar y a ejercer el sacerdocio universal de los creyentes. La misión tiene lugar por doquier. Impulsados por la fe, los seguidores de Jescuristo cruzan la frontera entre los que creen y los que no creen, y del otro lado de esa frontera dan testimonio de su fe. Dado que Dios es un Dios misionero, el pueblo de Dios es un pueblo misionero. El Espíritu ha sido derramado sobre todo el pueblo de Dios, no sólo sobre unas personas seleccionadas. La comunidad de fe es la portadora primaria de la misión

Antioquia fue una iglesia que traspasó barreras sociales Hch 11:19-20, reconstruía vidas rotas Hch 11:21-24, busco la participación de otros Hch 11:25-26, cubría necesidades físicas y espirituales Hch 11:27-30, tenía un liderazgo compartido formando un equipo pastoral Hch 13:1, estuvieron dispuestos a extender los límites del reino de Dios hasta lo último de la tierra Hch 13:2-3 y resolvieron conflictos doctrinales, Hch 15:1-35. Antioquía tenía que ver con ser una iglesia abierta para la evangelización del mundo.


La iglesia que vive en misión es una iglesia que se reconoce como enviada al mundo. Es una iglesia que busca el propósito de Dios. Es saber escuchar la voz del Espíritu Santo trabajando en equipo. Es clave la oración y la relación unos con otros.


Somos llamados a vivir una fe trinitaria, una fe relacional; una vida de relación con Dios y con nuestro prójimo; se da prioridad al ser antes que al hacer. “Escuchar la palabra de Dios y escucharnos los unos a los otros van juntos; sólo podemos tener lo primero si estamos igualmente preparados para tener lo segundo”. Si queremos que la gente venga al conocimiento de Jesucristo, la iglesia en nuestros días debe avanzar en la unidad, el amor y el servicio.

La iglesia de Antioquia nos muestra un ministerio compartido y no individual. En la iglesia de Antioquia había disposición para escuchar y separar para la obra del ministerio los siervos que el Espíritu Santo indicaba. Como siervos, entendemos que cuando nos involucramos en la misión, estamos compartiendo la misión del Dios misionero y no proyectos personales. Estamos al servicio de la Missio Dei. Y nuestra misión es compartir la suya. Escuchamos, descubrimos y obedecemos la voz del Señor enviando a sus siervos al trabajo al que los ha llamado. Es el modelo a seguir.


Carlos Scott

"Pues Dios no nos ha dado un espíritu de temor y timidez sino de poder, amor y autodisciplina”, 2 Ti 1:6-7

La primavera de la iglesia 

“Todos, en un mismo espíritu, se dedicaban a la oración, junto con las mujeres y con los hermanos de Jesús y su madre María....  Cuando llegó el día de Pentecostés, estaban todos juntos en el mismo lugar.”, Hch 1:14-2:1
 
Lucas después de su evangelio escribe otro libro donde describe el nacimiento y el desarrollo de la primera comunidad cristiana y nos ofrece dos rostros de esta realidad. Por un lado, nos encontramos con la vida interna de la comunidad basada en la enseñanza, en la comunión, en el partimiento del pan, en la oración, milagros y en compartir sus recursos con los necesitados. Por otro lado, está el dinamismo misionero sostenido por la fuerza del Espíritu, la eficacia de la Palabra y la audacia de los seguidores del Camino. En el momento que Jesús es llevado a las alturas la comunidad de los discípulos está por comenzar su propio camino histórico. El Reino de Dios avanzará por el esfuerzo misionero y la acción del Espíritu Santo. La primera imagen que encontramos son personas que están a la espera donde antes de ser un equipo apostólico son una comunidad de oración. Su misión será animada por el derramamiento del Espíritu. Sin el Espíritu, no hay vida, no hay fuerza de expansión y no hay capacidad de testimonio. Sin ese impulso la iglesia queda desprovista para entregar el mensaje. Solamente el Espíritu habilita a la iglesia para presentarse en el mundo. “Por esta razón, te recuerdo que avives el fuego del don espiritual que Dios te dio cuando te impuse mis manos. Pues Dios no nos ha dado un espíritu de temor y timidez sino de poder, amor y autodisciplina”, 2 Ti 1:6-7 “El Espíritu Santo vendrá y los ayudará, porque el Padre lo enviará para tomar mi lugar. El Espíritu Santo les enseñará todas las cosas, y les recordará todo lo que les he enseñado.”, Jn 14:26

Carlos Scott

Foto Gilbert Lennox

martes, 18 de noviembre de 2025

El Espíritu Santo nos desafía a traer la realidad del cielo a la tierra

El más allá y el más acá

“¿Qué hacen aquí mirando al cielo? Este mismo Jesús, vendrá otra vez de la misma manera que lo han visto irse”, Hch 1:9-11.

El Espíritu Santo nos desafía a traer la realidad del cielo a la tierra. El capítulo uno de Hechos nos relata que Jesucristo les ordenó a los discípulos que no se alejaran de Jerusalén porque dentro de pocos días serían bautizados con el Espíritu Santo. “Habiendo dicho esto, ... fue llevado a las alturas... Ellos se quedaron mirando fijamente al cielo mientras él se alejaba. Se le acercaron dos hombres vestidos de blanco, que les dijeron: Galileos, ¿qué hacen aquí mirando al cielo? Este mismo Jesús, vendrá otra vez de la misma manera que lo han visto irse”, Hch 1:9-11. Estos dos hombres de blanco les indican, que hay que cambiar el enfoque y la dirección en la que tenemos puesta la mirada. “Los apóstoles no debían convertirse en exploradores del cielo”. Lo que les está diciendo es que no conseguirán que regrese el Señor con solo mirar el firmamento. Si solamente nos enfocamos en el más allá y nos alejamos del más acá, la consecuencia es que nos alejamos de los sufrimientos y angustias de la gente. “Si el ‘reino’ tiene que ver solamente con el ‘más allá’, los que predican ese ‘reino’ no tendrán mayores conflictos con el “más acá”. El Reino de Dios no es solo para mirar al cielo. Cuando la predicación solo se enfoca en el “más allá”, corre el peligro de decir y hacer poco a quienes tienen que vivir en medio de las injusticias y sufrimientos del “más acá”. Mientras permanezcamos acá, el Señor nos llama a involucrarnos en la misión. Como Jesús volverá, es en esta tierra donde debemos ser obedientes, en medio de circunstancias y dificultades bien terrenas. En el cielo está nuestro Señor sentado a la diestra de Dios y tenemos todos los recursos para vivir y desafiar al "más acá" con todo el Evangelio, Ef. 1:3, 2:6-7, Lc 10:19-20.

Carlos Scott

Foto Gilbert Lennox 

Una iglesia relevante en la misión de Dios

“Una chispa que enciende el corazón”, Lc 24:13-49

El día que Jesús resucitó se encontró con dos de sus seguidores en el camino a Emaús (Lc 24:13-35). Jerusalén se había transformado en un lugar peligroso donde había hostilidad e incertidumbre. Estos creyentes estaban abatidos y preocupados. Se dirigían hacia el oeste y la puesta del sol. Sus esperanzas parecían estar muertas y enterradas. Sus sueños destruidos, era el ocaso. Parecía no tener explicación lo ocurrido con Jesús de Nazaret.

Jesús les dio significado a las cosas, les presentó un gran panorama, un amanecer y sus vidas tuvieron sentido. No comenzó por el final sino por el principio. La escritura dice: Entonces, comenzando por Moisés y por todos los profetas, les explicó lo que se refería a él en todas las Escrituras”, Lc 24:27. 

Jesús hablo con ellos y la oscuridad se hizo luz. No hubo ninguna receta mágica. La invitación fue simplemente a leer y a entender. Acercarnos a la palabra de Dios como realidad viva, como fuego. Confiarnos a la guía del Espíritu. Tener el coraje de arriesgar el corazón y de ir más lejos.

“Entonces se le abrieron los ojos y lo reconocieron…”. En una comida común, en una casa común y con un pan común fueron como estos hombres reconocieron a Jesús.  Se decían el uno al otro: ― ¿No ardía nuestro corazón mientras conversaba con nosotros en el camino y nos explicaba las Escrituras?, Lc 24:32.  La palabra que nos alcanza, es siempre el fenómeno de estar en el camino.

Ellos regresaron a Jerusalén lugar de peligro y hostilidad. Se preparaba la expansión global de su gloria. Esta sería lanzada con los discípulos desde un lugar peligroso: Jerusalén. Nada pudo detener la obediencia y el gozo de entender la gran visión del Señor. “Para dejar de caminar con pasos torpes, es necesaria una chispa, una sacudida que cambie el ritmo de los latidos del corazón” [1]

En Jerusalén junto a todos los discípulos Jesús mismo se puso en medio de ellos y les dijo: Paz a ustedes…” Lc 24:36. “Esto es lo que está escrito —les explicó—: que el Cristo padecerá…”, Jesús acentúa la cruz. “… y resucitará al tercer día,” Jesús acentúa su resurrección. y en su nombre se predicarán el arrepentimiento y el perdón de pecados a todas las naciones, comenzando por Jerusalén.”, Jesús acentúa la urgencia de la tarea en la misión mundial. “Ustedes son testigos de estas cosas. Ahora voy a enviarles lo que ha prometido mi Padre; pero ustedes quédense en la ciudad hasta que sean revestidos del poder de lo alto.” Lc 24.46-49, Jesús acentúa el secreto del poder.

 “Cuando estalló la persecución los apóstoles no se dispersaron… Permanecieron donde era más estratégico y, sin embargo, más peligroso. Fueron arrestados, humillados, censurados y golpeados más de una vez (Hch 4:1-21 y 5:17-41). Pero, aun así, continuaron. Con el tiempo, Jacobo fue muerto (Hch 12:2). Aun entonces, siguieron en Jerusalén, rehusándose a huir… Pedro fue arrestado. Fue necesaria una liberación angelical para terminar de convencerlo de buscar un lugar más seguro fuera de la ciudad (Hch 12:7). No hay ninguna indicación de que alguno del resto de los doce haya ido con él. Estas eran personas obstinadamente obedientes. Al parecer, no había amenazas que pudieran intimidarlos” [2]    

Ser testigo implica actuar en un contexto público. No es solo afirmar los hechos de Jesús sino también seguirle con disposición de sufrir (Hch 14:21-23). Es un testimonio constituido por el sufrimiento. Todo esto se da por hombres y mujeres comunes que actúan con valor. Son estos tiempos cuando se establece el valor de seguir a Cristo. “Y seguía aumentando el número de los que creían y aceptaban al Señor.” (Hch 5:14)

Como iglesia en el día de hoy necesitamos que Jesús se ponga a nuestro lado y nos abra el entendimiento para comprender las escrituras en la visión de Dios (Lc 24:45-48). Tenemos un propósito que nos transciende. Necesitamos renovar la confianza puesta en el Señor para ser testigos fieles en la ciudad, la nación y el mundo.  Es predicar el evangelio, no claudicar, no tranzar, no negociar valores y principios. El lugar peligroso es donde experimentamos el poder del Señor.

Preguntas para reflexionar y trabajo en grupos pequeños:

¿Qué significa estar en un lugar peligroso? ¿Cómo lo definimos? ¿Qué implicancias tiene?

¿En qué sentido los lugares donde estamos se pueden transformar en peligrosos?

¿Cuáles son los desafíos que debemos tomar en los lugares que Dios nos colocó?

¿Cuál es el mandato y la misión? ¿Cómo lo podemos hacer efectivo?

Carlos Scott



[1]Pronzato, Alessandro. Señor, ¿A quién iremos? P. 326, 2003, Ediciones Sígueme, Salamanca

[2]Hawthorne, Steven C, Actos de obediencia, Perspectivas del movimiento cristiano mundial, P.22.2, Editores Ralph D Winter y Steven C. Hawthorne, octubre 2016, Argentina,  

lunes, 17 de noviembre de 2025

Seguir a Jesús se trata de andar y caminar. Es vivir en diferentes situaciones y aprender a frecuentar los lugares de la ausencia

Cosas más grandes

“Mientras se esforzaban por verlo ascender al cielo, dos hombres vestidos con túnicas blancas de repente se pusieron en medio de ellos. «Hombres de Galilea—les dijeron—, ¿por qué están aquí parados, mirando al cielo? Jesús fue tomado de entre ustedes y llevado al cielo, ¡pero un día volverá del cielo de la misma manera en que lo vieron irse!», Hch 1:10-11

Seguir a Jesús se trata de andar y caminar. Es vivir en diferentes situaciones y aprender a frecuentar los lugares de la ausencia. Las personas vestidas de blanco confrontan a los apóstoles para que no se queden mirando al cielo. Se trata de establecer una conexión entre el cielo y la tierra. Jesús no abandonó la tierra y se hace presente por medio del Espíritu Santo. Hay un camino y huella que seguir. Son las huellas de los pies del Señor. Son pisadas que están por todos lados y nos llevan a otra parte. Muchas de estas huellas nos indican un destino, una señal, un signo. Principalmente es la señal de los clavos, la cruz y la resurrección. Jesús nos inspira a seguir su caminar y nos dice “Vengan a ver”. Hay señales por todas partes y nadie logra borrar sus huellas. Jesús las multiplica para dejarse descubrir y encontrar. Veremos cosas más grandes de las que imaginamos y solo nos queda aceptar su invitación. “Como dice la Biblia: «Para aquellos que lo aman, Dios ha preparado cosas que nadie jamás pudo ver, ni escuchar ni imaginar.», 1 Co 2:9

Carlos Scott

Foto Gilbert Lennox

domingo, 16 de noviembre de 2025

7th STREET - Koplarap ft. Martu Rizzo

La extensión del reino de Dios

Señales de una Iglesia Madura

“Siempre damos gracias a Dios por todos ustedes cuando los mencionamos en nuestras oraciones. Los recordamos constantemente delante de nuestro Dios y Padre a causa de la obra realizada por su fe, el trabajo motivado por su amor y la constancia sostenida por su esperanza en nuestro Señor Jesucristo, 1 Ts. 1:2-3

³  Nos preguntamos ¿Cuál son las señales de una iglesia madura? ¿Cuál es el verdadero criterio para evaluar a la iglesia?

³  Una iglesia que extiende el Reino de Dios y utiliza los recursos que Dios les ha dado es la que aprende a vivir bajo tres presupuestos teológicos: Fe, Esperanza y Amor

Nos preguntamos: “¿Qué es la Fe?”

³  Cuando hablamos de Fe decimos Confianza. Es la confianza y seguridad que una iglesia local tiene puesta en Jesucristo

³  Cuando hablamos de Fe hablamos de Fidelidad

³  Cuando hablamos de Fe hablamos de Visión

Nos preguntamos: “¿Qué es la Esperanza?”

ü  La esperanza describe un profundo conocimiento doctrinal que nos da estabilidad con respecto a nuestra relación presente y futura con Dios a través de Jesucristo

ü  “Es la Esperanza reservada en el cielo”, “la  constancia sostenida por la esperanza”. Es tenacidad ante la adversidad. Pedimos por el Espíritu de Sabiduría y Revelación para conocerle mejor.

ü  Es una Esperanza “que ilumina los ojos del corazón para que sepan a qué esperanza él los ha llamado”. Nuestro futuro afecta el presente. Porque sabemos de nuestro futuro nuestro presente es diferente. Jesucristo tiene toda autoridad por encima de cualquier sistema o gobierno.

Nos preguntamos: “¿Qué es el Amor?

Ø  El amor es la manifestación de la conducta a semejanza de Jesucristo

Ø  El amor describe como deben ser nuestras relaciones interpersonales. Se añade la dimensión de calor, ternura, cuidado, lealtad. Somos de una misma familia         

Ø  Nuestro trabajo debe ser motivado por el amor

Desafíos para la Iglesia Local...

w  Trabajar con equilibrio en cada área de acción (Jerusalén, Judea, Samaria y hasta lo último de la tierra). Dar dignidad a cada área de trabajo y que ninguna permanezca como una “cenicienta”.

w   La iglesia se pregunta ¿Por qué hay personas que no han recibido el evangelio? ¿Qué pasa con los que nunca han escuchado? ¿Por qué no han visto las buenas obras de los hijos de Dios para glorificar al Padre? y actúa en consecuencia.

w  Entender que la misión transcultural y global se nos ha dado independientemente de los recursos financieros que tengamos. Cada iglesia y cada cristiano, sea pobre o rico, tiene el privilegio y mandato de participar en la tarea de la misión global.

w  Se considera la tarea de la misión global como un privilegio y no como una carga. La membresía ofrenda sus propias vidas para que el evangelio este disponible para “todos”. Se provee a los misioneros transculturales apoyo moral, logístico, financiero, oración, comunicación, cuidado pastoral y soporte en su retorno.

Carlos Scott