El horizonte de la Espiritualidad
“Vete a la tierra que te mostrare”, Gn 12:1. “Mira hacia el cielo y cuenta las estrellas…así será tu descendencia”, Gn 15:5-6Una de las claves en nuestro caminar con el Señor consiste en “levantar la mirada”. Abraham tenía que levantar su mirada, salir de donde estaba y más adelante separarse de Lot. Levantar la mirada implica que hay algo más grande que Dios quiere hacer. “Te daré todo lo que abarque tu mirada”. Se nos está llamando a tener una visión amplia. Se trata de bendecir a todas las etnias, que el nombre de Dios sea reconocido y adorado y el mal derrotado. Una visión del Reino de Dios y el cielo renueva nuestra vida, Ap. 7:9-10.
Las circunstancias de Abraham, sus limitaciones, debilidades y edad avanzada no tenían que ser un obstáculo para creer. Debemos tomar todo lo bueno que Dios nos quiere dar y hacer lo que nos pide: “Abraham tenía que recorrer la tierra”. Mirar por nuestra nación, la gente que nos rodea y mirar por todos los pueblos es un comienzo que nos debe llevar a entender el porque de la existencia del Pueblo de Dios. "Te voy a bendecir y serás de bendición a todas las familias de la tierra."
Se nos llama a confiar y a creer en todo lo que vendrá después. Su palabra es “bendición” para toda la humanidad y este es el claro propósito de Dios. ¡Levanta tu mirada! porque la única información es la señal de partida.
Carlos Scott
Foto Gilbert Lennox