miércoles, 26 de mayo de 2021

¿Cuál es el futuro de las naciones?

 ¿Cuál es el futuro de las naciones?

Dios ha prometido reinar en la tierra. “¡Qué hermoso es ver llegar al que trae buenas noticias, al que trae noticias de paz, al que anuncia la liberación… «Tu Dios es rey»!”, Is 52:7
Para cumplir con el mandato de Jesús para las naciones (Mt 28:18-20), debemos tener una visión clara y cautivadora de Jesús como Rey en este mundo y de todas las naciones.
“Pero él se acercó y les dijo: «Dios me ha dado todo el poder para gobernar en todo el universo”, Mt 28:18. La nueva realidad de la tierra es que Jesús es el Rey supremo de las naciones. Dios bendice a todas las naciones por medio del reino de Jesús.
«¡Ya está cerca el día en que Dios comenzará a reinar! Vuélvanse a Dios y crean en la buena noticia.» Mc 1:15. Dios mismo viene a la tierra a reinar y liberar. Comenzó a reinar por medio del Rey prometido cuyo nombre es Jesús. Hay un llamado a responder a esta nueva realidad.
Jesús inauguró el reino de Dios en la tierra. Es la autoridad y el poder del cielo llegando a la tierra. “Y si yo echo fuera los demonios con el poder del Espíritu de Dios, con eso les demuestro que el reino de Dios ya está aquí.”, Mt 12:28. Dios hace algo nuevo. El Reino de Dios es la autoridad y el poder de Dios en acción sobre la tierra, Mc 1:21-45.
Dios ha revelado sus propósitos: Bendecir a todas las naciones, recibir gloria y reinar sobre todas las etnias. Dios quiere derrotar al mal por medio de su Reino.
Para Pensar: ¿Qué va a hacer este Rey prometido? ¿Qué mandato tiene la “comunidad del Reino de Dios''?

Carlos Scott

Foto de Gilbert Lennox

lunes, 24 de mayo de 2021

¿Cómo es que los oímos hablar en nuestra propia lengua?

   ¿Cómo es que los oímos hablar en nuestra propia lengua?

El libro de los Hechos registra los hechos del Espíritu Santo donde el principal héroe en la misión es Dios mismo. Son los hechos de la Misión de Dios y nos indica el modo en que la comunidad del Espíritu ha de vivir.
La fiesta del pentecostés hace referencia al número cincuenta porque se efectuaba siete semanas o cincuenta días después de pascua, que era cuando comenzaba la cosecha de granos (Ex 34:22, Dt 16:9-12, Nm 28:26-30, 2 Cr 8:12-14).
La celebración del Pentecostés se fue transformando poco a poco en una celebración de la entrega de la ley a Moisés en el monte Sinaí, porque se consideraba que había ocurrido cincuenta días después del éxodo.
“Cuando llegó el día de Pentecostés, estaban todos juntos en el mismo lugar. De repente, vino del cielo un ruido como el de una violenta ráfaga de viento y llenó toda la casa donde estaban reunidos. Se les aparecieron entonces unas lenguas como de fuego que se repartieron y se posaron sobre cada uno de ellos. Todos fueron llenos del Espíritu Santo y comenzaron hablar en diferentes lenguas, según el Espíritu les concedía expresarse”, Hch 2:1-4
El Espíritu descendió y hubo elementos sobrenaturales: “un estruendo o fuerte ruido” que se oyó que vino del cielo. Ese estruendo y ruido llenó toda la casa. Le siguió “una aparición” y es lo que se ve. Aparecieron “lenguas extrañas o sea idiomas” que se posaron sobre cada uno de ellos. Todos habían sido llenos del Espíritu Santo.
Al oír aquel bullicio, se agolparon y quedaron todos pasmados porque cada uno los escuchaba hablar en su propio idioma… ¡todos por igual los oímos proclamar en nuestra propia lengua las maravillas de Dios!”, Hch 2:5-11.
Todo esto representaba la nueva era del Espíritu. “El fenómeno mismo de hablar en lenguas tiene el propósito de comunicar el mensaje. Pentecostés es una visitación divina. Poder para ser testigos, vivir en pureza y hablar a todas las lenguas
Para Pensar: ¿Qué tipo de poder estamos buscando? ¿Cuáles son las aspiraciones que tenemos como iglesia? ¿Cuáles son las evidencias prácticas de la llenura del Espíritu Santo?
Carlos Scott

domingo, 23 de mayo de 2021

¿Cuál es nuestro principal enfoque para traer esperanza a este mundo?

 ¿Cuál es nuestro principal enfoque para traer esperanza a este mundo?

La tentación de los primeros discípulos fue pensar en su propio Reino, Hch 1:6.
Los apóstoles mantenían aspiraciones estrechas, nacionalistas. Estaban preocupados por su propio Israel. La respuesta de Jesús fue ampliar su horizonte, Hch 1:8.
La ”comunidad del Reino de Dios” está llamada a ampliar sus círculos de influencia. Lo que debían saber es que habrían de recibir poder de manera que entre la venida del Espíritu y la segunda venida del Hijo habrían de ser sus testigos en círculos cada vez más amplios.
Norberto Saracco comparte que «la misión que tenemos es ser testigos. Esto no es solo hablar acerca de…, sino vivir de acuerdo a… Debemos profundizar el discipulado de tal manera de encarnar aquello de lo cual queremos dar testimonio. El mayor escándalo de la iglesia es la contradicción entre lo que dice y lo que hace”.
“Debemos llegar al punto en que la gente simplemente diga: “yo quiero vivir como ustedes”. Sabemos que solos no podemos. Por eso en la promesa del Espíritu Santo se nos asegura que nos daría poder para ser testigos. Poder para el servicio y poder para una vida ejemplar»
Somos testigos. Testigos desde Jerusalén hasta el fin del mundo. “No deberíamos
detenernos hasta que ambos extremos hayan sido alcanzados”.
Todo el período entre Pentecostés y la segunda venida del Señor se ha de llenar con la misión global de la iglesia en el poder del Espíritu. Toda lengua, toda cultura, toda etnia está en el corazón de Dios
Para Pensar: ¿Cuáles son los círculos de influencia que la iglesia debe seguir ampliando? ¿Cuál es nuestro horizonte? ¿Qué implica ser testigos? ¿Testigos de qué?
Carlos Scott

sábado, 22 de mayo de 2021

¿Qué implica hablar del Reino de Dios en este tiempo de pandemia?

 ¿Qué implica hablar del Reino de Dios en este tiempo de pandemia?

Quien habla del Reino de Dios habla de traer el cielo a la tierra. La “comunidad del reino de Dios” está llamada a vivir y traer la realidad del cielo a la tierra.
El capítulo uno de Hechos nos relata que Jesucristo les ordenó a los discípulos que no se alejaran de Jerusalén porque dentro de pocos días serían bautizados con el Espíritu Santo, recibirán poder y serían testigos tanto en Jerusalén, Judea, Samaria y hasta los confines de la tierra
“Habiendo dicho esto, mientras ellos lo miraban, fue llevado a las alturas hasta que una nube lo ocultó de su vista. Ellos se quedaron mirando fijamente al cielo mientras él se alejaba. De repente, se le acercaron dos hombres vestidos de blanco, que les dijeron: Galileos, ¿qué hacen aquí mirando al cielo? Este mismo Jesús, que ha sido llevado de entre ustedes al cielo, vendrá otra vez de la misma manera que lo han visto irse.”, Hch 1:8-11
Estos dos hombres de blanco les indican, que hay que cambiar el enfoque y la dirección en la que tenemos puesta la mirada. Si solamente nos enfocamos en el más allá y nos alejamos del más acá, la consecuencia es que nos alejamos de los sufrimientos y angustias de la gente.
“Si el ‘reino’ tiene que ver solamente con el ‘más allá’, los que predican ese ‘reino’ no tendrán mayores conflictos con el “más acá”. Este tipo de evangelio les gusta a los poderes de este mundo, pero también, les puede gustar a los cristianos porque no les trae problemas.
El Reino de Dios no es solo para mirar al cielo. Cuando la predicación solo se enfoca en el “más allá”, corre el peligro de decir y hacer poco a quienes tienen que vivir en medio de las injusticias y sufrimientos del “más acá”. Mientras permanezcamos acá, el Señor nos llama a involucrarnos en la misión.
Para Pensar: ¿Cuál es el futuro de las naciones? ¿Qué significa ser una iglesia que se compromete en traer la realidad del cielo a la tierra? ¿Qué implicancias tiene?
Carlos Scott

viernes, 21 de mayo de 2021

¿Qué implica el discernimiento?

   ¿Qué implica el discernimiento?

La palabra discernir en el nuevo testamento tiene que ver con cortar. Es por lo general lo que hace un cirujano. Separar la parte enferma de la sana. Cortar en el lugar exacto.
El discernimiento es un don y habilidad espiritual que podemos desarrollar. Decidir entre lo verdadero y lo falso.
Es buen juicio teniendo una mirada clara y profunda. Vale aquí una aclaración y es que no tenemos que juzgarnos unos a otros, Ro 14:10-13. Un objeto filoso si no lo usamos bien puede causar mucho daño.
Hay una diferencia importante entre tener un buen criterio y juzgar a otros. En nuestro corazón y mente ocurren las tentaciones, se forman las opiniones, motivaciones, salen las virtudes, pero también está la raíz de nuestro pecado.
La Palabra de Dios es la que nos ayuda a discernir. Nosotros necesitamos tener buen criterio estudiando, comprendiendo y aplicando la palabra en nuestras vidas y contexto.
El tipo de criterio que adoptamos se forma por estudiar la palabra de Dios y la iluminación del Espíritu Santo para entenderla y practicarla.
El libro de Hebreos nos señala que la palabra de Dios es más cortante que cualquier espada de dos filos. Penetra hasta lo más profundo del alma y del espíritu, hasta la médula de los huesos, y juzga los pensamientos y las intenciones del corazón, Heb 4:12.
Necesitamos discernir con delicadeza, exactitud y bien fino los temas relevantes de la sociedad local-global y extendernos hacia la gente más olvidada de la ciudad, la nación y el mundo.
Indudablemente necesitamos de la comunión íntima con el Señor y de aquellos que nos pueden ayudar. En todo este proceso por lo general somos probados y se espera que aprobemos.
Cuando estamos unidos a la misión de Dios debemos ser generosos en saber dejar ir y respaldar a quienes Dios ha llamado.
Dios nos desafía a dar pasos de fe. Salir del orden natural para vivir en lo sobrenatural. Dios quiere iglesias fuertes y siervos con visión
Para Pensar: ¿Cuál es el trabajo que nos llama el Señor en los próximos años y qué nuevos desafíos pone en nuestras manos?
Carlos Scott
Foto de Gilbert Lennox

jueves, 20 de mayo de 2021

¿Qué valores tenes en cuenta al momento de tomar decisiones?

¿Cuáles pueden ser las oportunidades que Dios nos presenta?
Toda oportunidad debe estar alineada con los valores y principios de la palabra de Dios. Estos son los valores cristianos. Si Dios abre las puertas no habrá conflictos de valores.
Entre los temas importantes de la vida es clave recordar la prioridad sobre lo que Dios espera de nosotros: “¡Ya se te ha declarado lo que es bueno! Ya se te ha dicho lo que de ti espera el Señor: Practicar la justicia, amar la misericordia, y humillarte ante tu Dios”, Mi 6:8.
La fe y la guía del Espíritu Santo no significa que no tenemos dudas. La obediencia incluye la duda, pero la duda no debe excluir la obediencia. Dios nos ha dado la mente de Cristo y confía en nosotros que podamos discernir correctamente.
Nuestra oración es que el Señor nos ayude a tener comprensión espiritual, ver cuáles son las puertas abiertas que nos presenta y luego tener fe para atravesar las mismas, Col 1:9-11.
En la comprensión espiritual debemos discernir y tener sabiduría para distinguir cuando Dios no permite que avancemos (Hch 16:6-10) o bien si el impedimento es un ataque de Satanás, 1 Ts 2:17-18.
El consejo de la Palabra de Dios es “Si a alguno de ustedes le falta sabiduría, pídasela a Dios, y él se la dará, pues Dios da a todos generosamente sin menospreciar a nadie” (Stg 1:5, 3:17-18, 1Co 2:14-16).
Somos llamados a ser creyentes maduros teniendo capacidad de distinguir entre lo bueno y lo malo, ejercitando la facultad de percepción espiritual, Heb 4:12, 5:11-14.
Para Pensar: ¿Qué valores tenes en cuenta al momento de tomar decisiones?
Carlos Scott
Foto de Gilbert Lennox

miércoles, 19 de mayo de 2021

¿Cómo discernir lo que quiere el Señor?

 ¿Cómo discernir lo que quiere el Señor?

El trabajo misionero es el trabajo del Espíritu de Dios y la iglesia trabajando juntos. Entonces, ¿cómo llegar a tener cierta confiabilidad para poder avanzar?
En primer lugar, hay una revelación o evidencia interna (lo que Dios me está indicando). Esto mismo le pasó a Saulo (Hch 9:15, 13:47, 22:12-21, 26:12-18, Gá 1:11-24, 2:1-2).
Pablo recibe su llamamiento a través de su encuentro personal con el Señor y de Ananías, que es quien recibe la palabra del Señor en cuanto al modo en que Pablo ha de servirle. A partir de ahí Pablo vive 14 años formándose para el ministerio. Tendría unos 31 años cuando lo llamo, pero el cumplimiento de ese llamado se concreta aproximadamente a los 45 años de edad. Dios forma a un Pablo nuevo en esos 14 años.
En segundo lugar, está la evidencia externa manifestada por la comunidad de fe. Son todos aquellos que nos ayudan a discernir espiritualmente (Pr 11:14, Hch 11:25-26, 13:1-3, Gá 2:7,9).
Finalmente, en tercer lugar, nos encontramos con los acontecimientos que Dios permite para discernir y tener sabiduría en el conocimiento de su voluntad.
Los acontecimientos o circunstancias nos orientan a los nuevos pasos y oportunidades que tenemos (Hch 14:27, 16:6-10, 2 Co 2:12, Col 4:2-4). En el libro de Apocalipsis se habla de la iglesia de Filadelfia a la cual Jesucristo le presenta una puerta abierta y una oportunidad. Esto nos recuerda que Dios es quien coloca las oportunidades y cada una de ellas representa una puerta abierta que nadie puede cerrar.
La iglesia de Antioquia mostró sensibilidad al escuchar y obedecer al Espíritu Santo, Hch 11:19-30,13:1-3. Se transformó en una iglesia abierta guiada por el Espíritu. Es ser de bendición a la ciudad, la nación y el mundo compartiendo todo el evangelio.
Para Pensar: ¿Qué implica sujetarnos al impulso del Espíritu? ¿Cómo lo descubrimos?
Carlos Scott

martes, 18 de mayo de 2021

¿Es la misión sólo para algunos o para todos?, ¿Qué significa ser iglesia en el mundo de hoy?

 ¿Es la misión sólo para algunos o para todos?, ¿Qué significa ser iglesia en el mundo de hoy?

La iglesia es la iglesia en el mundo y para el mundo. La comunidad de fe es enviada a compartir el gozo y la esperanza, en medio de la tristeza y la angustia de la gente de nuestro tiempo.
Somos llamados a ser agentes de transformación hasta lo último de la tierra. La misión implica unir la acción local y la acción global de la iglesia en el cruce intencional de barreras, de iglesia a no iglesia, en ser, hacer y decir, palabra y obra a favor de la extensión del reino de Dios.
El Espíritu de Dios ha sido derramado sobre todos los cristianos, no sólo sobre algunas personas seleccionadas. Hemos sido enviados al mundo para amar, servir, predicar, enseñar, sanar y liberar. Es servir a todos y especialmente a la gente más olvidada de la ciudad, la nación y el mundo.
Dios «no quiere que ninguno perezca, sino que todos procedan al arrepentimiento», 2 Ped.3:9 y las estructuras eclesiásticas no deben obstaculizar el servicio relevante al mundo separando al creyente de la sociedad.
Debemos encontrar un equilibrio entre el “pueblo de la iglesia” y la “iglesia del pueblo”. El servicio no debe ser ofrecido sólo en la iglesia sino también en la vida común y corriente, ya sea en hogares, escuelas, oficinas, fábricas, tiendas, consultorios, en política, gobierno y toda actividad sociocultural y deportiva.
Dios confió el don del sacerdocio a todo el pueblo de Dios, 1 P 2:9. La iglesia es para todos y con todos. La clave es reconocer que la tarea le pertenece a la iglesia toda, y actuar en consecuencia.
La vida en misión es un privilegio.
Para Pensar: ¿Cómo definimos la vocación del cristiano? ¿Cómo se expresa o materializa?¿Qué significa estar en el seguimiento de Jesús?
Carlos Scott
Foto de Gilbert Lennox Photography

domingo, 16 de mayo de 2021

¿Qué implica ejercer el sacerdocio universal de todos los creyentes?

 ¿Qué implica ejercer el sacerdocio universal de todos los creyentes?

Esteban era un hombre lleno de fe y del Espíritu Santo, Hch 6:5. Se lo describe como lleno de la gracia y del poder de Dios haciendo grandes prodigios y señales milagrosas entre el pueblo, Hch 6:8.
Mientras los apóstoles enfatizan y retienen el ministerio de la palabra de Dios, “es Esteban quien proclama esta palabra, y da testimonio supremo de ella con su martirio. Acto seguido, es Felipe, otro de los ‘siete’, quien ocupa el centro del escenario al llevar el evangelio primero a Samaria y luego al eunuco etíope”
Hay una visión que deriva del Pentecostés y es que el Espíritu de Dios se derrama sobre todo el género humano, Hch 2:17. El futuro de la iglesia estaría en aquellos “griegos” que habían sido marginados.
Muchas veces una de las preocupaciones de la iglesia es buscar un patrón fijo o un modelo a seguir. El problema, puede estar en seguir patrones de aprendizaje que solo siguen la tradición sobre lo que se ha hecho hasta el presente. Corremos el peligro de amar más las instituciones que a Dios mismo.
“La iglesia de Dios está formada por personas, no en edificios y la palabra de Dios alude a las escrituras, no a las tradiciones. No debemos permitir que estos últimos aprisionen al Dios vivo o impidan su misión en el mundo”
Quienes quisieron hacer callar a Esteban, en realidad lo que hicieron fue ampliar su mensaje y programa de servicio. La persecución hizo que el mensaje se extendiera hasta Antioquia de Siria y desde allí a todo el mundo. Quizás, como en el caso de Esteban, los que se oponen pueden llevarnos a cumplir nuestra vocación y Dios puede estar usándolos a ellos para llamarnos a una nueva obediencia.
El desafío de la iglesia en el día de hoy es que debe revisar y ajustar su funcionamiento respondiendo a la Misión de Dios. Que Dios nos ayude en esto.
Para Pensar: ¿Que podemos visualizar con respecto al futuro y el sacerdocio de todos y todas? ¿En qué manera práctica respaldamos la iniciativa de los creyentes? ¿Qué significa experimentar una nueva obediencia?
Carlos Scott
Foto de Gilbert Lennox

sábado, 15 de mayo de 2021

¿Cuál es nuestra verdadera necesidad en la comunidad de fe?

 ¿Cuál es nuestra verdadera necesidad en la comunidad de fe?

Una iglesia de cara al mundo deja que el Espíritu reforme sus estructuras y organización. Lo importante para el Espíritu no son las estructuras sino la misión.
Seguir al Espíritu Santo es vivir centrados en "la persona de Jesucristo", "la gente" y no tanto en la institución, sus edificios, programas, reglamentos y estatutos. Hablamos de una iglesia cuya teología está basada en la relación y no en el rendimiento. La vida en el Espíritu destaca el apego por la pertenencia, la proximidad y la equidad junto a una fe sencilla cuyo concepto de éxito es la fidelidad a Jesucristo.
En el libro de los Hechos vemos que el Espíritu está decidido hacer nuevas cosas. Esto requerirá de un liderazgo diferente al conocido. Los apóstoles dijeron: “Hermanos, escojan de entre ustedes a siete hombres de buena reputación, llenos del Espíritu y de sabiduría, para encargarles esta responsabilidad. Así nosotros nos dedicaremos de lleno a la oración y al ministerio de la palabra.»” Hch 6:3-4
Es importante reflexionar sobre la relación que hay entre una misión que se va ampliando y la transformación de las estructuras junto al liderazgo de la iglesia para llevar a cabo esa misión.
El Espíritu hace surgir obreros para nuevas circunstancias y llevar adelante la misión. Por lo tanto: “Esta propuesta agradó a toda la asamblea. Escogieron a Esteban, hombre lleno de fe y del Espíritu Santo, y a Felipe, a Prócoro, a Nicanor, a Timón, a Parmenas y a Nicolás, un prosélito de Antioquía. Los presentaron a los apóstoles, quienes oraron y les impusieron las manos.” Hch 6:5-6
Como resultado de las decisiones que se tomaron, el texto de la palabra de Dios nos dice: “Y la palabra de Dios se difundía: el número de los discípulos aumentaba considerablemente en Jerusalén, e incluso muchos de los sacerdotes obedecían a la Fe” Hch 6:7.
Nosotros como iglesia debemos ver en este tiempo cuáles son las nuevas circunstancias y contextos que nos toca vivir. Debemos preguntarnos cuál es la mejor contribución que podemos hacer a la misión de la iglesia que siempre es cambiante. ¿Cómo, dónde y quiénes pueden hacer esta diferencia cualitativa?
Para Pensar: ¿Pueden nuestras estructuras, tradiciones y modelos obstaculizar la misión? ¿En qué casos? ¿Cómo podemos superar estos obstáculos?
Carlos Scott
Foto de Gilbert Lennox

viernes, 14 de mayo de 2021

¿Que puede significar que la comunidad de fe viva de acuerdo al Espíritu de Dios?

 ¿Que puede significar que la comunidad de fe viva de acuerdo al Espíritu de Dios?

El libro de los Hechos nos da a entender el modo en que el Espíritu obra en la comunidad de fe.
Cuando el Espíritu Santo descendió en el día de Pentecostés no todos vieron este milagro, no todos respondieron positivamente. Si bien la iglesia pasó de 120 a 3000 personas en un solo día, no todos pudieron percibir el milagro. Algunos estaban “desconcertados y perplejos, se preguntaban: ¿Qué quiere decir esto? Otros se burlaban y decían “lo que pasa es que están borrachos”. No entregarme a la vida del Espíritu es no poder percibir el milagro que Dios quiere hacer en este mundo.
Una iglesia guiada por el Espíritu Santo es una iglesia que no se burla, ni descalifica a los demás, Hch 2:13, Mc 6:1-6. Es abierta al Espíritu (Mc 3:20-30, Lc 11:14-23), busca su llenura (Hch 4:23-31) y se dedica a la oración.
Hablamos de una iglesia abierta al mundo que entiende que el evangelio es para toda clase de persona sin excepción, Hch 10:34.
Somos desafiados a no perder la capacidad de asombro. Lamentablemente muchos piensan que el Espíritu Santo se ha de manifestar solo de una manera particular en la predicación, servicio o culto y si no es así, nos burlamos de otros, los tratamos mal o los descalificamos.
El Espíritu sopla de donde quiere, Jn 3:8. Cuando se teme o se critica, lo que se puede estar temiendo, es la pérdida del control. Se nos llama a no entristecer al Espíritu Santo: “No agravien al Espíritu Santo de Dios, con el cual fueron sellados para el día de la redención”, Ef. 4:30. No menospreciemos a otros hermanos o sectores de la iglesia.
La actividad del Espíritu Santo es siempre una experiencia que nos supera, nos sorprende y caemos rendidos a Él. “El libro de los Hechos nos habla que el Espíritu Santo actúa, no para hacer que todos se conformen al mismo patrón, o que todos sean iguales, sino para que la gracia de Dios sea accesible a todos por igual.”
Para Pensar: ¿Qué implica una Iglesia contextualizada con su medio para que el evangelio esté disponible a toda persona por igual?
¿Somos personas que respetamos a otras expresiones cristianas y la acción del Espíritu Santo en medio de ellos?
¿Solemos reconocer, respetar y aprender de la obra de Dios y la acción de su Espíritu en otras culturas?
Carlos Scott
Foto de Gilbert Lennox

jueves, 13 de mayo de 2021

¿Cuáles pueden ser algunos paradigmas a tener en cuenta en este tiempo?

 "Cuando oyeron el fuerte ruido, todos llegaron corriendo y quedaron desconcertados al escuchar sus propios idiomas hablados por los creyentes." Hch 2:1-6

La iglesia que surge en el Pentecostés es una iglesia pública, la gente escucha y ve. Es una iglesia dirigida a todas las lenguas que nace siendo misionera, no pasa desapercibida y se desarrolla saliendo hacia afuera.

Pentecostés implica ser una iglesia abierta que glorifica a Dios. La comunidad de los creyentes se organizó en Jerusalén donde da sus primeros pasos, pero con motivo de la persecución camina hacia Samaria, Antioquia y luego a todo el mundo. Ellos comenzaron a viajar en vez de protegerse y predicaban a Jesucristo.

El mundo necesita ver una iglesia abierta que sea inclusiva y no exclusiva. Una iglesia que mira hacia afuera, busca la simplicidad, camina por todas partes, es inquieta y se atreve hacer cosas diferentes.

"La fe cristiana es una fe que nació para caminar". Hablamos de una iglesia donde pueda predominar una dimensión eclesial y no clerical. La gente es libre, respetada, vive el poder del amor y ejerce el sacerdocio universal de todos los creyentes.

El Espíritu Santo llama a su iglesia a repensar su estructura o institucionalidad para enfocarnos en su misión.

Este tiempo de pandemia puede ser es un tiempo de espera para pensar en cómo salir de los modelos de repetición e imitación para centrarnos en lo nuevo que viene del Espíritu de Dios.

Para Pensar: ¿Que elementos tendremos en cuenta para volver a repensar la vida de la comunidad de fe? ¿Que implica ser una comunidad para la gente? ¿Cuales son los cambios que tenemos que hacer a nivel institucional o estructural para ser la iglesia del pueblo y con el pueblo?

Carlos Scott

Foto de Gilbert Lennox

martes, 11 de mayo de 2021

¿Podemos visualizar y repensar el futuro en la comunidad de fe para el tiempo de post pandemia?

 ¿Podemos visualizar y repensar el futuro en la comunidad de fe para el tiempo de post pandemia?

Jesús es nuestra celebración, pero ¿qué suele suceder cuando el “vino se acaba”?. Juan en el capítulo dos de su evangelio nos habla de una fiesta, una boda; en una aldea llamada Caná de Galilea. Jesús, sus discípulos y la madre de Jesús se encontraban allí. Jesús con su presencia afirma la importancia de compartir la alegría y felicidad. Dios quiere que celebremos la vida. Nos quiere colocar un “traje de fiesta en vez de espíritu de desaliento”, Is 61:3

En un determinado momento la fiesta se quedó sin vino. María se angustió y se acercó a Jesús. No tener vino en una fiesta de boda implicaba vergüenza y humillación. Sin vino, decían los rabinos, no hay fiesta. “Su madre dijo a los sirvientes: "Hagan lo que él les ordene”.

"Había allí seis tinajas de piedra, de las que usan los judios en sus ceremonias de purificación. En cada una cabían unos cien litros. Jesús dijo a los sirvientes: Llenen de agua las tinajas y los sirvientes las llenaron hasta el borde", Jn 2:5-6.

Jesús transformó el agua en el mejor vino. El uso de las tinajas dedicadas para almacenar agua para los lavatorios rituales de manos y de los utensilios quedan atrás y hay una sustitución por lo nuevo. Es el nuevo vino, un nuevo sabor. Encontramos la sustitución de la tradición y lo viejo por lo nuevo. Es la provisión de la nueva era del Espiritu que siempre obliga a la iglesia a renovarse.

Dios está comprometido en manifestar su gloria y se espera creer en él, Jn 1:14, 2:11, 20:31. La era de Jesús se caracteriza por la abundancia del buen vino, Jer 31:12, Jl 3:18, Am 9:13. Es el inicio de las cosas mayores, ¡Vas a ver aun cosas más grandes que éstas!, Jn 1:50

Como comunidad de fe somos llamados a estar en el seguimiento de Jesús y transformar el agua en el mejor vino, Jn 14:12. Jesús es la alegría de la humanidad, transforma la vida y es el nuevo vino

Para pensar: ¿Cuales son los nuevos paradigmas que se pueden estar formando?
¿Que significará ser iglesia para la gente de la ciudad, la nación y el mundo? ¿Hacia dónde nos quiere llevar Jesús? ¿Hacia dónde quiere que apuntemos?

Carlos Scott

Foto de Gilbert Lennox

30 Días de oración por el Mundo Musulmán | Día 15: Samarcanda, Uzbekistán